Vidas de scouts (III): Hansel Izquierdo
Luego de una carrera como lanzador, Hansel encontró otro camino en el scouting
Siempre he escuchado que uno vive muchas vidas dentro de la misma. Es un pensamiento que puede atribuírsele a casi todos los seres humanos, sobre todo a aquellos que han desarrollado diferentes etapas en sus vidas, como Hansel Izquierdo. Muchos años después de una carrera de más de 15 temporadas en el béisbol profesional, el habanero comenzó en el mundo del scouting con los Chicago Cubs, una segunda carrera en la que ya lleva casi una década de trabajo.
En 1994 integró el equipo Cuba juvenil al Campeonato Mundial de Connecticut, pero en una escala en el aeropuerto de Miami cambió el destino de su vida junto a su amigo Michael Tejera. En compañía de su tío y Tejera, Hansel corrió por el aeropuerto hasta ver un policía y decirle “!Asilo, asilo¡” para comenzar una nueva vida.
Izquierdo, de 47 años y natural de la Habana, llegó a Grandes Ligas en 2002 con los Florida Marlins y, aunque esa fue su única temporada en el “Show”, luego estuvo lanzando en Ligas Menores con los Montreal Expos, Chicago Cubs, Chicago White Sox, New York Yankees, Pittsburgh Pirates, así como en los circuitos de invierno y verano de México, Puerto Rico, Taiwán y Ligas Independientes. Su hoja de servicios después de ese 2002 semeja la de un trotamundos del béisbol. Esa misma experiencia fue la que contrataron los Chicago Cubs en 2016 cuando lo asignaron como scout de área del mercado cubano.
Hansel viaja constantemente a Colombia, México, Venezuela, Panamá, República Dominicana o Bahamas reclutando talentos para los campeones de Serie Mundial del 2016. Durante los últimos 5 años nos hemos encontrado en diversos tryouts o presentaciones de beisbolistas cubanos. Sus reportes han servido para firmar jugadores con potencial de Grandes Ligas y, a la vez, he sido testigo de su crecimiento dentro de este complejo ecosistema del scouting.
Una vez me confesó que disfrutaba pocas cosas como hacer scouting. La historia de cómo llegó a esta posición, delata un poco ese sentimiento. En el invierno de 2015, Hansel viajó a San Diego donde se realizaban las Reuniones Invernales entre dueños de equipos en el hotel Marriot Marquis. En este tipo de encuentros, no solo se discuten cambios entre las 30 organizaciones, también asisten durante 4 días dueños, gerentes, directores de scouteo para tratar diversos asuntos dentro del negocio del béisbol.
En aquel entonces Hansel Izquierdo fue a esa reunión en San Diego con la firme determinación de encontrar trabajo. “Me encontré con mucha gente del béisbol y andaba buscando una oportunidad, no importaba si era dentro del scouteo o en el player development como coach”, me contó Hansel en uno de nuestros encuentros en el año 2021.
Se trata de un espacio donde una persona puede dedicarte 10 minutos o tan solo dos. Hansel conversaba y entregaba su resume a la mayor cantidad de personas que encontraba en su paso. Después de varios meses de su valiente aparición en los Winter Meetings, los Chicago Cubs respondieron. Hansel no solo suponía una adición con experiencia como jugador, además fue contratado por su cercanía con el mercado cubano y su conocimiento del mismo.
Por tanto, fue más bien el scouting quien eligió a Hansel Izquierdo, nuestro invitado en la tercera entrega de la serie Vidas de Scouts.
¿Cómo y por qué te interesas por el scouting? Tengo entendido que entrenabas lanzadores cubanos para firmar profesional. ¿Por qué decides entrar al mundo de la evaluación de talento?
La verdad fue una oportunidad de entrar de nuevo al sistema que yo andaba buscando. Fueron Louie Eljaua, Vicepresidente de Scouteo Internacional de Chicago Cubs, y Alex Suárez, Senior Director de Desarrollo y Operaciones de Jugadores Internacionales, los que me dieron la oportunidad. El scouting es otro ángulo, otra rama de lo que es el interesante juego del béisbol.
Coméntame de este trabajo, muchos viajes, a veces lejos de la familia, ¿cuán complicado es y si crees que tiene el reconocimiento que merece por parte de las personas?
La parte más difícil del juego para mí es esa, es el tiempo que uno pasa lejos de la familia. Yo creo que el reconocimiento de las personas viene desde adentro, de los éxitos que vayas teniendo, pero adquiere más valor cuando viene de todas esas personas que le han dedicado gran parte de sus vidas al juego.
Tú fuiste lanzador de Grandes Ligas, ¿Qué crees de la analítica actual y cómo ha cambiado el scouteo desde tus tiempos de jugador a esta época?
La analítica es una herramienta que nos ayuda a recolectar información más profunda de los jugadores y mientras más información poseemos es mejor. El scouting ha cambiado mucho por eso, la evaluación ahora es mucho más profunda.
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Mencióname tus funciones actuales con los Chicago Cubs.
Primero siento la necesidad de expresar el agradecimiento y la gratitud que siento con Alex Suárez y con Louie Eljaua por creer en mí desde el primer día. Louie es uno de los scouts más exitosos en la historia de este gran deporte y Alex goza de un alto IQ, pero también se ha convertido en un gran scout y en un hombre de béisbol. A la organización de los Chicago Cubs, por la oportunidad y por la bendición de pertenecer a esta gran franquicia, y lo digo con un buen nivel de humildad, por el aprendizaje y por la responsabilidad. Mi posición en la organización se encarga de la evaluación a los jugadores cubanos. Cuando uno ama su profesión siempre quiere mejorar y hacer un poco más, pero existe un proceso de aprendizaje en este juego gallardo, que nunca termina. Es la naturaleza de este juego intuitivo.
Coméntame sobre el proceso de una firma. Tú ves un talento, envías un reporte, ¿Cómo es el proceso para lograr firmar a un jugador profesional?
Existe un proceso detallado para la firma de un jugador. Primero el scout ve a ese jugador y lo evalúa desde su punto de vista. Si cree que sus herramientas pudieran desarrollarse para un día ayudar al equipo en Grandes Ligas, se lo presenta a sus superiores de la organización y de ahí se va creando un ranking list.
Según el resultado de mis estudios y datos, entre el 15% y el 20% de los jugadores que salen de Cuba están firmando acuerdos profesionales, una cifra baja. ¿A qué crees que se deba esto?